Los pasos a seguir para presentar una reclamación por negligencia médica y obtener justicia.
La profesión médica dispone de un conjunto de conocimientos especializados para garantizar la salud de los pacientes. Todos esos conocimientos y su puesta en práctica se rigen por una serie de normas deontológicas.
En concreto, los facultativos cuentan con protocolos de actuación que buscan que el ejercicio médico se oriente siempre a la correcta sanación del paciente.
En ocasiones, sin embargo, la consecuencia de la práctica del profesional médico es una lesión o un daño físico o psicológico sobre el paciente. Cuando esto ocurre, es posible que podamos hablar de una negligencia médica.
Entonces, ¿cómo podemos reclamar por una negligencia médica? Habrá que concretarla y acreditarla muy bien, pues daría derecho al paciente o a su familia a obtener una compensación económica. No es nada fácil determinar si la lesión o el daño se ha causado por una negligencia médica o si forma parte de los riesgos que conllevan algunas intervenciones o tratamientos.
Índice de la publicación:
¿En qué casos se produce una negligencia médica?
Una negligencia médica puede originarse en cualquier etapa de la atención sanitaria. El médico es responsable de los riesgos que ocasione su falta de pericia desde el comienzo hasta el final del proceso. Un proceso que comienza con la exploración y el diagnóstico.
Por ejemplo, hablamos de una negligencia si el médico no aprecia una patología grave, o si no realiza una exploración o las pruebas adecuadas.
Al emitir el diagnóstico, este puede resultar equivocado, aunque no siempre se deba a una negligencia. Si las consecuencias son muy graves para el paciente, habrá que estudiar en profundidad esta responsabilidad médica.
Tras el diagnóstico, el médico ha de elegir qué tratamientos o intervenciones se le realizan al paciente. Precisamente, este es el momento en el que suceden más frecuentemente las negligencias médicas.
Por ejemplo, son habituales los casos en los que se produce un olvido de material dentro del paciente tras una cirugía. O puede suceder que, tras la intervención, no se realice un seguimiento adecuado, poniendo en riesgo la recuperación del paciente.
¿Qué requisitos deben darse para que se considere negligencia médica?
Fundamentalmente, debe existir lo que se conoce como mala praxis. Es decir, que el profesional no haya seguido las prácticas aceptadas dentro la profesión y los protocolos de actuación establecidos.
Sin embargo, muchas veces el médico debe arriesgarse con casos o diagnósticos que no son nada claros y que dependen de su propio criterio.
En esos supuestos más confusos, para demostrar la negligencia se ha de comparar la actuación del médico con el modo en que lo hubiera hecho el resto de la profesión en esas mismas circunstancias.
La ‘lex artis’ médica
En este punto nos encontramos con el concepto de ‘lex artis’. Así se denomina judicialmente a los niveles profesionales y de calidad que cabe exigir a la profesión médica, en contraposición a la anteriormente comentada mala praxis.
La ‘lex artis’ se basa en las decisiones que por lo general hubiese tomado el conjunto de la profesión en un caso concreto. Se utiliza por comparación, pues no estamos ante un grupo de normas concretas y establecidas.
Esto, en el fondo, quiere decir que un médico puede separarse de los estándares aceptados por la profesión ante una situación que así lo requiera, pero siempre midiendo bien los riesgos y explicándoselos al paciente.
Resumiendo, se considera que un médico ha sido negligente si concurren las siguientes circunstancias:
Ha actuado de una forma distinta a como lo harían el resto de colegas, es decir, con mala praxis.
Ha actuado de forma imprudente al no valorar adecuadamente los riesgos y sin contar con el paciente, es decir, sin respetar la ‘lex artis’.
Como consecuencia de cualquiera de esas actuaciones, se ha provocado una lesión o daño al paciente, ya sea físico, estético o psicológico.
Y no habría responsabilidad o negligencia, si:
Se han producido daños al paciente, pero el médico no incurre en mala praxis.
El médico comete cierta mala praxis, pero actúa de forma prudente, cumpliendo con la lex artis.
El procedimiento para reclamar por una negligencia médica
Las reclamaciones por negligencias médicas son posiblemente las más complicadas de llevar a trámite con éxito. La razón fundamental es que el paciente lesionado tiene que ser capaz de demostrar que su daño deriva directamente de la actuación del médico.
Entonces, ¿cómo reclamar por una negligencia médica? Es necesario recurrir a un perito médico, que debe realizar un informe de tipo forense para ayudar a los jueces o tribunales a discernir si la conducta del médico ha sido la correcta.
Previamente, es necesario contar con un abogado especialista en reclamaciones médicas que se encargue de reunir toda la documentación que sirva para evaluar si cabe o no la reclamación.
Si se llega a la conclusión de que procede la reclamación por negligencia médica, esta se puede interponer en una de estas tres jurisdicciones:
Civil: si la negligencia se ha producido en un hospital, centro o consulta privados.
Contencioso-administrativa: si la negligencia ha tenido lugar en un hospital, centro o consulta de la sanidad pública y permite reclamar una indemnización por responsabilidad patrimonial de la administración.
Penal: si el daño es tan grave que puede calificarse como delito. Por ejemplo, si la consecuencia ha sido la lesión de un feto o la muerte del paciente.
En cualquier caso, la cuestión esencial es la capacidad de acreditar de forma fehaciente la responsabilidad del médico y explicarla de forma bien argumentada.
El mejor consejo en este sentido es contar con un abogado especialista en la materia, para garantizar que la reclamación sigue su curso con probabilidades de éxito.
Si sospecha que ha sido víctima de negligencia médica, no dude en ponerse en contacto con nuestro despacho especializado en reclamaciones por negligencia médica. Nuestro equipo altamente cualificado estará encantado de ayudarle a obtener justicia y compensación por el daño sufrido. Contáctenos hoy mismo para programar una consulta inicial gratuita y discutir su caso en detalle. ¡Gracias por leer!
コメント